Este contenido ha sido tomado de: Conociendo a Dios y a Nosotros Mismos
Porque el ser humano no puede subir y descubrir lo ignoto, es Dios quien baja, el que se revela a los humanos. Dios no puede ser contemplado por un telescopio, ni examinado en un microscopio. Es necesario reconocer nuestra debilidad e ignorancia; y partir de la revelación divina, para comenzar a entender lo que somos como criaturas, y quién es nuestro Creador.
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